CAPITULO 27

BUENO LAMENTO NO HABER SUBIDO SUBIDO AYER, TUVE QUE SALIR A UN CUMPLE DE UNA TÍA Y DESPUÉS ME ENTERE DE UNOS PROBLEMAS, ASÍ QUE AQUÍ LES DEJO EL CAP,

PDT : GRACIAS A TODAS TAS TOKIITAS QUE COMENTAN :) SE LES AGRADECE A MIL!! Y ALE TE CREO YO TAMPOCO ESTOY PREPARADA PARA LA UNIVERSIDAD, PERO CREO QUE ESTE AÑO QUE VIENE CREO QUE SOLO TRABAJARE YA QUE NO TENGO BIEN DECIDIDO LO QUE QUIERO ESTUDIAR

-Dejémoslo como está. Y olvida este absurdo coqueteo. ¿Qué tratas de conseguir con ello?

-¿Necesitas que te lo explique?

-No, pero me gustaría saber la razón, la verdadera razón.

-Quizá debería explicar lo que estoy sugiriendo -dijo Bill pensativo.

-Creo que lo entiendo. Sólo quiero que me expliques qué te hace suponer que acostarnos juntos sería una buena idea -dijo (Tu nombre), y dio un sorbo a su capuccino-. Por cierto, no suelo acostarme con los hombres que me invitan un café.

-Sabía que ibas a decir eso. Será mejor que también te dé esto -dijo Bill, entregándole el libro sobre protocolo que ocultaba en su espalda.

-No creo que se hable de está situación en el libro.

-Ten cuidado o asustarás con tus comentarios a Jason.

-No lo creo. Estoy segura de que estará encantado de que sus sospechas se confirmen. Es cierto que confiaba en hacerse cargo de la dirección de todas las tiendas, ¿verdad?

-Sí.

-Será mejor que tengas cuidado. Quizá sea él quien ha filtrado cierta información al periodista.

-¿Cómo sabes lo del periodista?

-Me lo dijo Dave. Me dijo que hubo un reportero siguiendo a Caroline ayer.

-Me pregunto qué ha sido de la confidencialidad del abogado con su cliente.

-Quizá piense que el reportero pueda hacer lo mismo conmigo y por eso me advirtió.

-Quería hablarte de ello para decirte que ya lo he arreglado todo. De hecho, ése era el motivo por el que quería verte esta mañana. Pero me distrajiste.

-¿Te distraje?

-Los calcetines amarillos, ¿recuerdas?

-Si eso va a hacer que te olvides de informarme de cosas que tengo que saber, devuélvemelos.

-¿Como lo del periodista?

-Eso es lo primero que me viene a la mente, pero no lo único. Me gustaría saber qué es lo que va a suceder en esa fiesta de compromiso. ¿De verdad decías en serio lo de invitar al presidente de la competencia? También me gustaría saber cuándo vamos a empezar a hablar en serio de mi negocio. Y...

-Jason está listo para empezar a hacer las fotos. Hablaremos sobre todo esto cenando.

-¿Y si yo ya he hecho planes para cenar?

-Eso no tiene sentido. Soy el único hombre que hay en tu vida en este momento. Además, todavía tengo que explicarte por qué es una buena idea que durmamos juntos. ¿0 prefieres que te lo diga ahora en mitad de la sesión de fotos?

Bill tenía que admitir que disfrutaba discutiendo con ella. Además, así evitaba que hablara de otras cosas que provocaran que Jason hiciera incómodas preguntas.

(Tu nombre) sonrió.

-Dímelo ahora mismo. Apuesto a que todo el equipo estará encantado de saber que todavía no nos hemos acostado -dijo.

Estaba encantada de ponerlo en un aprieto.

-Tú misma me estás dando argumentos. Has reconocido que es una tontería no compartir cama, así que no tengo que convencerte de eso.

-No he dicho eso. Guarda esos argumentos para quien pueda interesarle, Bill.

-A ti te interesa -dijo él acariciándole la mejilla. (Tu nombre) se movió y tiró algunas de las toallas qe estaban apiladas-. Ten cuidado con la mercancía.

-Voy a comprar esta toalla como recuerdo -dijo (Tu nombre) recogiendo una.

-Se me ocurren otras cosas mejores como recuerdo. Además, ese color no te queda bien -dijo él quitándole la toalla y colocándosela burlonamente sobre la cabeza.

-Ten cuidado con el pelo -dijo (Tu nombre).

-No te preocupes por el pelo. Me gusta más cuando lo llevas revuelto.

-Si ya habéis acabado de jugar, es hora de volver al trabajo -dijo Jason.

Al oír la voz de Jason, los miembros del equipo dejaron de sonreír. (Tu nombre) se puso a doblar las toallas que se habían caído. Mientras se ponía de puntillas para tratar de colocarlas en su sitio, Bill estudiaba las curvas de su cuerpo. Finalmente, (Tu nombre) se dio la vuelta.

-¿Me ayudas a colocar las toallas?

-Por supuesto.

Pero en lugar de colocarlas, Bill la tomó por la cintura y la levantó del suelo para que alcanzara la parte alta de la estantería. (Tu nombre) dejó escapar un grito y, por un momento, Bill estuvo a punto de perder el equilibrio y hacer que los dos se cayeran. Ella colocó las toallas y luego lo miró.

-Ya está. Puedes bajarme. Y la próxima vez, avísame de lo que vas a hacer.

-Lo hice -repuso Bill, dejándola en el suelo sin soltar su cintura-. Te avisé de que quería tocar tu vestido y ésta me ha parecido una buena oportunidad.

Para (Tu nombre), el día fue más largo y cansado que el día anterior. Además, Jason parecía más enfadado que de costumbre. El haber elegido ella misma la ropa, con el apoyo de Bill, lo había molestado. Estaba dispuesto a recuperar su autoridad, aunque tuviera que hacerlo a la fuerza.

Quizá fuera mejor aceptar las decisiones de Arabella, pensó (Tu nombre). Si hubiera llevado poliéster en vez de . ante, Bill no habría tenido excusa para tocarla.

Aunque seguramente no habría habido diferencia. El vestido de ante había sido una excusa estúpida. Estaba segura de que, aunque hubiera llevado plumas y él hubiera sido alérgico, habría hecho lo mismo. Habría hecho cualquier cosa para aturdirla. Porque, aparentemente, eso era lo que pretendía. Lo que la enojaba era que, a pesar de reconocer su estrategia, no podía hacer nada por tranquilizarse.

Cada vez que lo miraba, volvía a sentir el calor de sus manos en la cintura. Se quedó contemplando durante unos instantes su boca y recordó una vez más el suave roce de sus labios.

Quizá Bill no hablara en serio cuando le propuso cerrar la puerta de su despacho y hacer el amor. Probablemente tan sólo había sentido curiosidad y no pasión. Pero, ¿qué sentía ella?

No tenía que dejarse llevar por estúpidos sentimientos. Estaba allí por un asunto de trabajo, simple y llanamente. Pero ahora que la frontera entre el trabajo y los sentimientos se había desvanecido, no sabía con seguridad lo que sentía. Estaba enfadada con él por aprovecharse de la situación y no sabía cuáles serían sus razones para hacerlo.

-Venga, (Tu nombre) -dijo Jason sacándola de sus pensamientos-. Concéntrate en lo que estamos haciendo.

(Tu nombre) se contuvo. Más tarde ya tendría tiempo de sentarse a pensar. Necesitaba tiempo para aclarar su mente y decidir lo que quería, especialmente respecto a Bill.

Cuando las últimas fotos del día estuvieron hechas, lo único que (Tu nombre) deseaba era tumbarse y dormir.

-Necesito hablar con Caroline y arreglar unas cosas -dijo Bill mirando su reloj-. Tengo que saber si ha ocurrido algo mientras hemos estado haciendo las fotos. ¿Quieres venir conmigo a mi oficina o prefieres ir de compras?

-Después de un día tan intenso, no sé cómo eres capaz de sugerir ir de compras.

-Pensé que las mujeres erais capaces de ir de compras en cualquier momento.

-Pues ya ves que no. Me voy a casa.

-Habíamos quedado para cenar, ¿recuerdas? Íbamos a hablar de todas aquellas ideas que tenías en mente y de las que no me acuerdo ahora.

-Por suerte para ti, no tengo hambre y estoy muy cansada para hablar. Todo lo que quiero ahora mismo es deshacerme de...

-¿La ropa? -la interrumpió Bill mirándola con ojos brillantes.

-... los zapatos y ponerme cómoda.

-Tú elegiste esos zapatos -dijo él mirándolos.

-Sí, pero eso no significa que no me haya equivocado -dijo ella dirigiéndose hacia la puerta.

-Está bien, vete a casa y ponte cómoda. Compraré algo de cena y me iré a tu casa.

-He dicho que no.

-Tienes que comer para recuperar fuerzas. ¿Qué tipo de comida te gusta? ¿Mejicana, oriental, italiana...?

-La de Marte -bromeó (Tu nombre)-. Lástima que el restaurante más cercano esté demasiado lejos. Nos vemos mañana.

(Tu nombre) miró a su alrededor en busca de sus bolsas y las vio detrás de una cámara. El director de arte se las entregó.

-La mejor toma del día ha sido la de las toallas -dijo. -No lo dudo.

-No creo que Jason esté de acuerdo.

Le caía bien aquel joven que sabía arreglárselas para trabajar con Jason a pesar de sus diferencias. (Tu nombre) sonrió y se dirigió al aparcamiento.

El tráfico era denso. Al menos, cuando llegara a casa, Dave habría acabado de trabajar y se habría ido. Así no tendría que contestar preguntas.